Ayer paseé por Providencia en la búsqueda de un libro para mi hija Martina. Mi recorrido obligado es siempre una visita a Nostalgic y a Vintage, luego al Drugstore y terminar en Orrego Luco 130 cuando está la Queni. Ayer precisamente no pude hacerlo todo porque andaba apurada, pero pasé por fuera de Vintage y vi esta en la vitrina
Mi camisa color block de jeans que compré hace dos años en asos.com.
No me considero ni la mujer más a la moda ni una trendsetter ni nada por el estilo, pero me da lata cuando lo que uno cree original y único para uno se masifica. La tienda Vintage comenzó siendo un poco de ropa usada exclusiva o de temporadas anteriores de marcas de EEUU como Lush o Forever 21. Luego empezó a mutar en copias de lo que uno ve en Nasty Gal o asos, copias tan idénticas como ésta.
No pagué caro por la camisa en asos, creo que incluso me costó más barata que esta de Vintage. Comprendo también que no todos tienen el privilegio de comprar con la tarjeta de crédito en tiendas de afuera. En realidad es un pensamiento tonto, pero quería manifestar que lo que se vende como super tendencia y novedad, ya está atrasado desde origen. Es por eso que la gracia está en tomarlo y transformarlo en prenda única y sólo tuya, adaptarlo a tus gustos y combinarlo como te parezca y tenga tu propio estilo. Para no andar todas uniformadas con blusitas cuello de bebé, pitillos y tachas, no?
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